Este camino
ya nadie lo recorre
salvo el crepúsculo.
Bacho.
La vasta noche
no es ahora otra cosa
que una fragancia.
Borges.
El rayo nace,
el viento postra el árbol.
la lluvia es vida.
En éste Plácido domingo algunos Haikús que he llamado 'criollos' puesto que son desviados de la preciosa creación de sus homólogos nipones y como decía en alguna entrada anterior, son en mi forma de ver simples versos "desustanciados" sin las rigurosas 5, 7, 5 sílabas, solo respetando los tres versos... y todo porque escribí algunos en una servilleta de cafetería a 'pluma alzada'... mirémoslos:
Haikú N° 82
Como cualquier pequeño
niño inocente e ingenuo
amé, lloré y olvidé...
***
Haikú N° 83
Tome el sendero
de la luna rosa
no te encontré...
***
Haikú N° 84
La oscura noche
escondió tus pasos
perdí tu huella...
***
Haikú N° 85
La herida de amor
abierta en mi mente
jamás cicatrizó...
***
Haikú N° 86
Era una plegaria
que se desliza
en el tiempo ido...
***
Haikú N° 87
Tenía que espantar el miedo
desaciertos, ruinas y errores
falsa esperanza de dicha y plenitud.
***
Haikú N° 88
Fuiste fuego voraz
hoy solo cenizas son
tristeza y confusión...
***
Haikú N° 89
El silencio de la tarde
se perdió con el ocaso
añoro la fresca penumbra...
***
Haikú N° 90
Al mirar a la distancia
presiento tranquilo
el final de todo lo vivido...
***
Haikú N° 91
Los ojos tristes tiene
el abuelo su barba blanca
con su gran sonrisa franca...
***
Haikú N° 92
La levedad de los
pensamientos se
pierden en el vendaval...
***
Haikú N° 91
Sacrificio amor y dolor
símbolo bello del ayer
fue mi Madre protectora...
***
Con una alta dosis de cariño y el abrazo de siempre...
Hortensio.
Los pequeños haikús siempre serán bellos pues lo dicen todo.
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