domingo, 4 de julio de 2021

Liliht, la mujer que se fugo del 'Edén'.

Aunque haya sido eliminada de la Biblia,
no cabe duda de que Lilith, es un referente
femenino del respeto a si misma, liberación
vitalidad y rebeldía.
Hortensio Farwel.

Un saludo muy especial en éste Plácido domingo primero de julio... hoy con un tema algo extraño pero a la vez folklórico y que ha sido tema de innumerables obras en la literatura universal, tanto en occidente como en las antiguas mitologías de oriente cercano. Sí, el mito de Lilith (espíritu del viento) y su leyenda, su belleza inhumana enmarcada en su melena rojiza y su piel extremadamente blanca, 'la mujer fatal', igualmente símbolo y arquetipo de rebeldía y libertad, inquieta e inquisitiva, vital, pero que ha sido utilizada por el judaísmo para introducir el concepto de maldad que siempre se ha ligado al 'erotismo femenino', pues bien ésta es su mitología como la primera mujer sobre la faz de la Tierra. 

La Lilith de Collier...

Según algunas interpretaciones rabínicas, que tomaron su figura de la mitología sumeria cuando se encontraban en la diáspora de Babilonia, y que debido a este fragmento del Génesis, no pudieron quitarla de la Torá y el Talmud y la llamada Biblia cristiana: "y creo Dios al hombre (Adán) a su imagen y semejanza, a imagen de Dios los creó; varón y hembra los creó". Hasta aquí la palabra del Señor y punto. ¿Entonces como enfrentarla a la historieta de la costilla llamada Eva? Se tienen cientos de interpretaciones rabínicas desde serias en su medio como las del rabino Rubén Hoschke Kohen, que dice en sus escritos  del siglo XVII: "Dios formó a Lilith del mismo modo que había formado a Adán, aunque utilizó inmundicia y sedimento en lugar de polvo puro". Otro imbécil rabino le dio por explicar que Adán era un ser que Dios creó andrógino, que poseía un cuerpo masculino y otro femenino y que estaban pegados por la espalda".

El mitólogo Robert Graves, asegura que "hubo otra mujer antes de Eva, la rebelde y lujuriosa Lilith, que finalmente abandonó el paraíso". Y de nuevo aparece con más sentido de igualdad de esta inefable mujer en el alfabeto de Ben Sira (siglo VIII) allí se narra que Lilith no se resignó a yacer por debajo de Adán: ¿Por qué he yacer debajo de ti? Yo también  fui hecha con polvo y por lo tanto, soy tu igual" así se pronuncio la hermosa 'hembra' al ser forzada por el primer maltratador de la historia a que lo obedeciera y Ella al negarse pronuncio en vano el nombre mágico de Yahvé que estaba prohibido y decidió fugarse del Edén con dirección al Mar Rojo, en cuya costa se asentó, antes de someterse y renunciar a si misma.

El mito babilónico de Lilith.

Se dice y se tiene por cierto por los cuentistas hebreos, que allí se encontró con el 'Ángel Caído' y sus innumerables demonios con los que engendró nuevas criaturas, súcubos "a razón de más de cien por día" y el Luzbel le dio por esposo al más poderoso de sus ángeles caídos, Samael (Veneno de Dios). Ante semejantes hechos Dios envió a tres ángeles (Seniy, Semangelof y Sansenoy) para exigirle a Lilith, que volviera con Adán: "Regresa con Adán de inmediato o te ahogaremos". Ella les respondió que no podía regresar porque "Dios me ha ordenado que me haga cargo de todos los recién nacidos, de los niños hasta el octavo día de vida (el de la circuncisión) y de las niñas hasta el vigésimo día". Ante semejante respuesta llena de ingenio frente a unos desconcertados ángeles, Dios le permitió vivir pero la castigó haciendo perecer a cientos de sus hijos cada día. Desde entonces la hermosa Lilith se propuso matar a cuantos hijos de Adán pudiera y a sus madres durante el parto.

Pero en la Biblia esta mujer es nombrada por el profeta Isaías en 34:14."...también allí reposará  Lilith y en el encontrará descanso" es la personificación del adulterio y la fornicación pasional. En la traducción de la Vulgata en su versión medieval su nombre es cambiado por la demonio grecorromana de Lamia y no la celebre criatura del folklore judío. Cientos de referencias a esta criatura especial que no se dejó maltratar por su esposo y prefirió fugarse del Edén a ser humillada por este... vale la pena leer sobre Ella y la gran corriente literaria que ha arrastrado su nombre hasta nuestros días.


Un endemoniado abrazo de pandemia.

Hortensio.