domingo, 17 de julio de 2016

A mi amor lejano.

Mi amor lejano...
Li Po (Li Tai Po),  nació en el 701 y murió en el 762, de la era cristiana a los sesenta y dos años, dentro de la dinastía Tang y junto con Tu Fu, menor que su amigo (710-770), son los más significativos poetas del clasicismo chino. De la difícil traducción del chino arcaico... estos poemas se caracterizan por su expresión de musicalidad, son libres de todo convencionalismo y formalismos, son vehementes y pasionales como sus autores quienes rompieron con los rígidos marcos de sus antepasados y fueron poetas románticos por excelencia pero a su vez muy realistas. Aunque contrastados, fueron muy amigos, se respetaban y admiraban con cariño... bohemio y taoísta, aquel; éste, un bardo social y confuciano. En éste Plácido domingo, algunos de sus poemas más conocidos...

Pero quisiera antes que escucharan y leyeran el poema que Li Po, le dedicó a su 'hermano menor', como le decía a Tu Fu, cuando éste viajó a otra ciudad, cuentan que ni el vino consoló su partida:

No logra embriagarme
el vino de Lu. En vano
quieren hechizarme
las canciones de Ch'i.

Te evoco, amigo,
y desde el sur,
por el río Den,
a ti va mi pensamiento.

Tu Fu, no se quedó atrás para con su 'hermano mayor' y le dedica su famoso poema "Soñando con Li Po", poema elegíaco que es considerado uno de los más bellos de la literatura universal:

Li Po, he soñado contigo.
Te hallabas ante mi puerta,
pasando tu mano por tu pelo blanco.
¿La pena te amarga el corazón?
Después de diez mil,
de cien mil otoños,
sólo tendrás el premio vano
de la inmortalidad.


Li Tai Po
El hermano mayor


        A mi amor lejano
Cuando estabas, las flores llenaban la casa.
Y al irte, dejaste el lecho vacío.
La manta bordada, doblada, permanece intacta.
Tres años ya han transcurrido,
pero tu fragancia no se disipa.
¿Dónde estarás, amor mío?
Te añoro, y de los árboles caen hojas amarillas.
Lloro, y sobre el verde musgo brilla el rocío.


* Balada de Qiu Pu. Provincia de Anhui, en donde el poeta escribió 17 de sus baladas.

Ante el espejo
Mide mil varas mi cabello cano.
Y mis tristezas miden otro tanto.
Me miro al espejo cristalino,
y no me explico por qué está escarchado.


De noche

Agua diáfana... luna clara...
En el resplandor de la luna, vuela una garza.
¡Escuchad! Las doncellas recolectoras de castañas de agua,
inundando de canciones la senda, retornan a casa.


Libación solitaria bajo la luna
Rodeado de flores, ante un jarro de vino,
bebo solo, sin compañera.
Alzo la copa, y convido a la luna.
Ella, mi sombra y yo, venimos a ser tres amigos.

Aunque la luna no puede beber,
y mi sombra en vano sigue a mi persona,
las tomo por transitorias compañías.
¡Divirtámonos, amigas, antes de que pase la primavera!

Canto, mientras la luna pasea.
Bailo, mientras mi sombra vacila.
Antes de mi embriaguez nos entretenemos juntos.
Y cuando estoy ebrio, se deshace nuestra compañía.

¡Oh, luna! Seras mi inmortal amiga,
nos veremos a menudo, a través de la Vía Láctea.


Una noche entre amigos
Para ahuyentar las eternas tristezas mundanas,
nos entregamos a beber, por centenas de jarros.
La hermosa noche invita a largas pláticas,
y la brillante luna nos quita el sueño.
Ya ebrios, nos acostamos en la yerma montaña.
El cielo es nuestro cobertor, y la tierra, nuestra cama.



Tu Fu:
El hermano menor

Pobreza y riqueza
Detrás de las puertas de los poderosos
hay vino amargo y carne podrida. Afuera:
cadáveres congelados. Abundancia y hambre
están separados por unos cuantos pasos.

El sauce

El sauce mueve sus suaves ramas
con la gracia de una quinceañera.
Estoy triste porque al amanecer
un ventarrón se llevó su rama larga.

La puesta del sol

El sol poniente cuelga de los ganchos de mi cortina,
y el crepúsculo envuelve el arroyo de primavera.
Las flores perfumadas cubren los jardines de la orilla.
Humos de fogones se elevan sobre las lentas barcas.
Gorriones parleros se disputan las ramas,
y en todo patio, errantes, los insectos vuelan.
Oh, vino turbio, ¿Quién te ha inventado?
Una sola copa bastará para disipar miles de tristezas.

Bueno, esta fue una pequeñita muestra de esa arcaica poesía china, tan bella, tan simple y tan sentida
Un abrazo.

Hortensio.