La cerveza es la mejor prueba de que Dios
nos ama y quiere que seamos felices.
Benjamín Franklin.
Como todo Placido domingo en Bogotá, tengo que comentarles que con ésta página de Blogger, he llegado a 600 entradas desde el primer domingo que empecé a escribirla; cuando llegué a las 500 pensé tomar un descanso (yo) o dejar descansar a mis limitados contertulios (Ustedes) pero la verdad es que sin pensar en las estadísticas, seguí y aquí me tienen de nuevo con 100 entradas más. Hoy el turno es para Su Majestad el Alcohol, la magnifica reflexión del mejicano Mariano Osorio...
Famosa pintura de monjes consumiendo alcohol. |
Me conoces
soy el príncipe de todas las alegrías
el compañero de todos los goces
humanos y mundanos
el mensajero de la muerte
el rey que gobierna al mundo
un mundo muy mio
en cuyo reinado soy el amo
estoy presente en todas partes
en todas las ceremonias
ninguna reunión es tal sin mi presencia
fabrico adulterios hago nacer corazones
pensamientos negros y criminales
a jóvenes y adultos los hago inmorales
y los contemplo satisfecho
soy el padre de la corrupción
de la desgracia enveneno la raza
y la sangre mancho los hogares
traigo el envilecimiento y la depravación
la locura el crimen y el suicidio
yo acabo con la familia ocasiono
conflictos en todos los países y entre
todos los hombres crímenes y desgracias
en los hogares hago nacer niños raquíticos
y retardados yo soy el causante de las
enfermedades más dolorosas e incurables
aspiro a ver al mundo en un hospital
en un manicomio en presidios porque
yo nazco en todas partes mi patria es la
tierra mis esclavos los hombres y mujeres
mi casa el infierno yo soy el rey
SU MAJESTAD EL ALCOHOL.
Pero aunque es una verdad cierta y relativa, no lo era así para el gran dramaturgo George Bernard Shaw, quien dijo en una ocasión: "El alcohol es la anestesia gracias a la cual aguantamos la operación de vivir." En otra ocasión una señorita opositora de Winston Churchill lo encontró borracho y le gritó ¡que feo es verlo así!, ¿no le da pena? a lo que el héroe de la 'segunda guerra mundial' le contestó: Pues no y puede que esté borracho, señorita, pero mañana por la mañana yo estaré sobrio y usted seguirá siendo fea". De igual forma el laureado guionista y actor Robert Benchley, en una entrevista le preguntaron sobre su alcoholismo y en una muestra de su ácido humor contestó: "Sé que al beber estoy matándome lentamente, pero es que no tengo ninguna prisa en morir".
"Cuando veo una conferencia sobre alcoholismo en televisión, cambio de canal y veo 'El minuto de Dios' de García Herreros" comentaba a sus amigos, el escritor Hortensio Farwel, al igual que la pregunta de siempre para hacerlo quedar mal por consumir whisky, el periodista le pregunta a Stephen King ¿usted bebe alcohol? y mirándolo con cierto desprecio le contestó: "¿Que si bebo alcohol? ¿Que parte de 'soy escritor' no ha entendido?" Y la adorable mejicana Frida Kahlo, comentó una vez: "Quise ahogar las penas en alcohol, pero las condenadas aprendieron a nadar".
Sammy Davis Jr. lo dijo en una ocasión: "Bebo por que el alcohol me da infinita paciencia para aguantar la estupidez". Y el genial Ernest Hemingway, sentenció: "Bebo para hacer más interesante a los demás". Y para terminar este tema que ha acompañado a la humanidad desde 'un siempre' comentaba ese gran borracho americano llamado Charles Bukowski: "Siempre voy a los peores bares esperando que me maten, pero lo único que consigo es volver a emborracharme" y concluía: "Ese es el problema con la bebida, pensé mientras me servía un trago. Sí ocurre algo malo bebés para olvidarlo, si ocurre algo bueno, bebes para celebrarlo; y si no pasa nada, bebes para que pase algo".
Un abrazo con tufo de cerveza...
Hortensio.
P.D. "Señor, si con beber te ofendo, con la resaca me sales debiendo".
Cuando el famoso monje benedictino Dom Pérignon, probó su primera partida de champán en 1715, Pérignon exclamó en gritos a sus compañeros del monasterio: "¡Hermanos, venid de prisa: ¡Estoy bebiendo estrellas!".