La justicia y la libertad.

Uno de los pensadores más preclaros y prolíficos de su tiempo fue Hugues-Félicití Robert La Mennais... 'Lamennais', (1782-1854) filósofo y teólogo francés quien sin la más mínima 'vocación' se hace sacerdote católico, con el tiempo y por sus fuertes posturas frente al papado de Roma fue perseguido por la misma iglesia católica, por haber escrito un libro (Palabras de un creyente) y no retractarse de lo escrito sino persistir en sus ideas; fue un libertario comprometido con causas como la independencia de Polonia, Bélgica e Irlanda y furibundo defensor  y partidario de la separación entre la iglesia y el estado. Sus creencias lo llevan a evolucionar.

Lamennais en su periodo de cura.

El apoyo explicito de Gregorio XVI  a la represión rusa sobre Polonia, indigna a Lamennais, quien rompe con la iglesia católica y fue considerado apóstata; Fue amigo de Fleury, Arago y de Frank Liszt quien le presentó a George Sand cuya casa se convirtió en 'el cenáculo republicano'... Lemannais fue muy unido con ella, pero rechazó sus ideas sobre el divorsio y la libertad social aunque se inició con ella y con Bourges en el llamado 'socilismo político'.

La George Sand, llegó a decir en una reunión de amigos que: ''Le contamos entre nuestros santos... es Usted el nuevo padre de nuestra nueva iglesia". También fue considerado como difuso precursor del 'anarquismo'... Mijaíl Bakunin, el gran anarquista dijo de Mennais a modo de elogio: "Si hubiera vivido más, habría resultado siendo ateo" esto lo decía por su incontenible avance en las ideas humanistas en contraste con la poca importancia que le daba a las cuestiones religiosas.

Ataco al gobierno del rey y fue condenado a un año de prisión y en 1.848 fue elegido diputado a la Asamblea Constituyente, pero un golpe de estado contra la misma le determinó en retirarse a sus propiedades en Bretaña. Por no haberse reconciliado con la iglesia y haber pedido a sus servidores que al morir lo enterraran sin rito alguno, el cadáver del gran pensador libertario, fue botado al muladar de la fosa común del Pére-Lachaise  

De él, el siguiente escrito lleno de una inquietante refelexión que no ha perdido ni actualidad ni frescura preceptual, mirémoslo:

La Justicia y la Libertad 

          El labrador soporta el peso del día, expónese a la lluvia, al sol, a los vientos, para preparar con su trabajo la cosecha que ha de llenar para otoño sus graneros.

          La justicia es la cosecha de los pueblos.

          Levántase el artesano antes del alba enciende su padre lámpara y afanose sin cesar para ganar un poco de pan que le alimente a él y a sus hijos.

          La justicia es el pan de los pueblos.

          No rehusa el mercader tarea alguna, ni se queja de ningún trabajo, desgasta su cuerpo y olvida el sueño a fin de acumular riquezas.

          La libertad es la riqueza de los pueblos.

          Cruza el marino los mares, entrégase a las olas y a las tempestades,  aventúrase entre escollos y sufre el frio y el calor, a fin de proporcionarse un descanso algún descanso para la vejez.

          La libertad es el descanso de los pueblos.

          Sujétase el soldado a las más duras privasiones, vela y pelea, y da su sangre para lo que llama gloria.

          La libertad es la gloria de los pueblos.

       Si hay un pueblo en la tierra que estime en menos la justicia y la libertad que el labrador su cosecha, el artesano un pedazo de pan, el mercader las riquezas, el marino su descanso, y el soldado la gloria, levantad en derredor de ese pueblo una altísima muralla a fin de que su aliento no infeccione al resto de la tierra.

         Cuando luzca el gran día del juicio final de los pueblos, sérale dicho: ¿Qué hiciste de tu alma? No ha sido vista de ella ni señal ni huella. ¿Todo lo han sido para ti los goces del bruto? Has gustado del todo, anda a pudrirte en el lodo.

          Y por lo contrario, el pueblo que por encima de los bienes materiales haya colocado su corazón los bienes verdaderos, que para conquistarlos no haya perdonado medio y fatigas, trabajo ni sacrificio, oirá estas palabras:

          A los que tienen alma, la recompensa de las almas. Por cuanto has amado más que todas cosas la libertad y la justicia, ve y posee para siempre la justicia y la libertad.

Un abrazo libre y justiciero.

Hortensio.

Recordando algunas sentencias...

Quienes se asoman a esas pequeñas esquirlas, escolios, aforismos, pensamientos y más conocidas como sentencias, solo quieren encontrar gotas de sabiduría que através de todos los siglos han provocado meditación y por sobretodo un llamado a la introspección que conlleva siempre reflexión y racionalidad frente a los avatares de la vida. Lo leído es evidente, pero sorprende por ser pensamientos sugerentes, inspiradores e ingeniosos... disfrutenlos.

- 'Bastante trabajo me ha costado cometer mis pecados como para malbaratarlos en arrepentimientos vanos', decía en un concierto Joaquín Sabinas.

-  'La alegría pasada es pasada , -decía Lord Byron - pero el dolor pasado es dolor todavía'.

- 'Una sonrisa es una curva que endereza todo'  sentenciaba Noel Clarasol.

Sentencia popular

- 'No hay camino que no tenga fin' dijo Séneca antes de tomar la cicuta.

- Renan dice bien cuando dice: 'Puede la iglesia anatematizar a Voltaire, puede la influencia y temerosa mano de la madre quitarlo de tu biblioteca... ¡de tí no lo arrancaran jamás, porque Voltaire eres tu mismo'. 

- 'El polvo que piensa no vuelve al polvo. La idea es fuerza de incalculables resultados: penetra, se difunde, se transforma eternamente - oraba Jesús Urueta ante el recuerdo de Juarez - Toda palabra fecundiza, toda predicación deja su semen en el surco'.

- Einstein, 'jamás pienso en el futuro porque enseguida llegaba.

- Y no podía faltar Farwel cuando sentenciaba que 'La más vil de las mentiras no es nada comparada con una verdad malintencionada'. 

- 'Temed al hombre de un solo libro' sentenciaba el santo Tomás de Aquino, solo basta con mirar a esos idolatras cristianos apegados a la Biblia, para ver en ellos a peligrosos fanáticos.

- 'Procurate la satisfacción de ver morir tus vicios antes que tu' le decía el filósofo estoico Lucio Anneo Séneca, a Hortensio pero ya sabemos que no fue así, murió lleno de ellos.

- 'Con audacia se puede intentar todo más no conseguir todo' comentaba a sus generales Napoleón Bonaparte, al ver que tal acción militar era de dudoso resultado ¿Lo intentamos, señores...?

- De nuevo Farwel sentenciaba: 'El valor casi siempre vence al miedo, la curiosidad... ¡siempre!'.

 -  Hacer todo lo contrario de lo que pida el cuerpo es nefasto para él; con razón decía Gourmont que 'de todas las aberraciones sexuales, la más singular tal vez sea la castidad'.

- Le comentaba Lucano a su esclavo y amigo al ver a un infeliz orar y rendirle ofrendas a los dioses del Olimpo: 'Los hombres le temen a los mismos dioses que han inventado' ¡valla estupidez!.

- Señalando a un "pastor" cristiano que se robaba los diezmos en las narices de las "ovejas" en la iglesia, Robert Burton soltó ésta ingeniosa sentencia satírica: 'Allí donde Dios tiene un templo, el demonio suele levantar una capilla'.

- 'En un mundo en donde todo es replica, ser único es un deber que hay que consolidar día con día', le decía Hortensio Farwel a sus hijos.

- Ya de viejo Jorge Luis Borges, en las aceras de París pensaba en voz alta para que un amigo lo oyera que :'Uno sabe que es viejo cuando descubre que ya nunca será pleyboy, millonario, empresario del jet-set, jefe de estado, actor sexy, detective, deportista o arquitecto y como no ha triunfado en el poder, el dinero y el amor, sólo le queda a uno realizarse a si mismo'.

- El gran emperador estoico de Roma, Marco Aurelio, ya muy viejo y cansado, le decía a su hijo Cómodo, delante de sus generales y consejeros: 'No lo hagas sino conviene; no lo digas, sino es verdad'. No lo asimiló y murió asesinado denigrando de todos muy poco tiempo después de ser nombrado emperador.

- Hay un Anónimo que me gusta mucho por la verdad que encierra la sentencia: 'Los ojos se fían de ellos mismos, las orejas se fían de los demás'... ¿Cierto...no?

- Y se lo oí decir a Facundo Cabral, en un recital antes de su estúpido asesinato en Guatemala, repudiando a esos enfermos acumuladores compulsivos: 'Escapa de los que compran lo que no necesitan, con dinero que no tienen para agradar a gente que no vale la pena'. ¡Que denigrante situación! al fin enfermos...

- 'La fama es espuma en la corriente de la vida' sentenciaba Tagore el príncipe de los poetas de la India sobre esa efímera, costosa y hasta trágica hija espúrea de la reputación.

 - 'En el transcurso de los siglos, el hombre no ha dejado nunca de creerse bello. Pero pienso que más bien cree en su belleza por amor propio, - y continua el conde de Laufrémont - aunque en realidad no es bello y lo sospecha; sino, ¿Porqué contempla el rostro de sus semejantes con tanto desprecio?' ¿Amargado? generalizar siempre a sido malo... ¿nunca vio acaso unos ojos tan bellos como los de mi Gordita?  

- Meleagro de Gádara, filósofo sirio de expresión´ griega, 140 a 120 a.C. le decía en Atenas a uno de esos idiotas nacionalistas: 'Sirio soy ¿que te asombra extranjero, si el mundo es la patria en que todos vivimos, paridos por el caos?

- Dijo Martin Luther King: 'Al final no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos'.

- Y lo leí en su primer canto de Maldoror, cuando Isidoro Lucien Ducasse, barruntaba: '¿Quien comprenderá que dos amantes que se idolatraban la víspera, se separan por una palabra mal interpretada, uno hacia el oriente, otro hacia el occidente, con los aguijones del odio, de la venganza, del amor y de los remordimientos y no se vuelven a ver nunca más, embozado cada uno en su altanería solitaria?'. Orgullo mal infundado, fastidioso egoísmo... estupidez humana.

- Y para terminar por ahora, Farwel: 'Podrás encontrar todo lo que te propongas, menos el momento perdido'.

Un abrazo y otro abrazo...

Hortensio.