domingo, 19 de septiembre de 2021

Ignorance is Bliss.

Solo sé que nada sé; y esto cabalmente
 me distingue de los demás filósofos
que creen saberlo todo.
Sócrates.
Y alguien para ofenderme me dijo ¡ignorante! me limité a contestarle: ¡Pero feliz!... Siempre he oído que, 'la ignorancia es la noche de la mente', y todos somos ignorantes en una u otra medida y como dijese un filósofo -cuyo nombre no me acuerdo- muy pragmático en su racionamiento: "...en muchos de los actos del ser humano, para ser feliz es mejor estar en la ignorancia que sabiendo demasiado". Ignorar significa creer que se sabe, es decir, lo que se cree saber está ausente de ser, y de ese orden, no sólo no es el ser, sino aún más, no es el no-ser... y aunque en filosofía todo es relativo, Lo mejor: ignorar...

Añadir sabiduría es ir añadiendo tristezas. (Farwel)

En este Plácido domingo, la felicidad que la ignorancia da... y comienzo con el libro del Eclesiastés de la Biblia que en una disociación de la razón con la realidad de ser feliz, aconseja en una sentencia: "Quien añade ciencia, añade dolor". Con este consejo pienso como muchos otros pensadores que el conocimiento y el saber tienen un punto perverso que malogra al ser humano y lo sume en la infelicidad. Y el grandísimo profesor Immanuel Kant, gran filosofo del racionalismo -paradójicamente - sugirió sin miramientos que: "quienes elijen el conocimiento asumen una existencia desdichada". Lo mejor: ignorar...

En la mitología greco-romana, el fauno Sileno, es considerado sabio, fue el padre adoptivo y preceptor de Dionisius, dios del vino, era descrito como el más viejo de los borrachos y leal seguidor de su pupilo el sátiro, es citado por el historiador Plutarco (Consolación a Apolonio) en donde la leyenda dice que este aconsejaba a los mortales: "Una vida vivida en el desconocimiento de los propios males es menos penosa". En esa línea, los antiguos griegos acudían a los 'Oráculos' con un temor reverencial al consultarlos pues ese morbo de conocer el futuro que añoraban fuese favorable como una recompensa, podría también ser desfavorable; esa disyuntiva tan poderosa de acudir a los dioses, para ellos era poderosa... Creer que algo pueda suceder, por saber o simplemente por estar bien informados, sin duda nos afectará de manera positiva o negativa y ésta es la peor. Lo mejor: ignorar...

Sin palabras...

En un estudio sobre las evaluaciones médicas en donde se juega a la tan manida 'prevención' se entra al mismo juego morboso de la duda... a un recién pensionado le insistían ir a consulta y el contestaba: "me siento bien, no quiero saber nada de exámenes y consultas médicas, así estoy bien, déjenme ser feliz". Psicosomáticamente estaba muy bien, pero ante asedio de su familia cedió, lo enfermaron y murió muy prematuramente. Ignorar el estado de salud que no conlleva síntomas siquiera leves de algún padecimiento, es fuente de buena salud. El cuerpo es sabio y manda los mensajes para ser atendidos por su dueño, no antes, repito eso es morbo y negocio para los médicos. Todo lo que atañe con la salud vuelve desgraciados a los humanos. Lo mejor: ignorar...

Lo anterior es solo una muestra, ahora los dejo con el pensamiento de algunos esclarecidos pensadores que están de acuerdo con este humilde émulo de ellos:

Para Albert Einstein: "En los momentos de crisis, solo la imaginación es más importante que el conocimiento". Y concluía: "Todos somos muy ignorantes. Lo que ocurre es que no todos ignoramos las mismas cosas". Para el escritor rumano Emile Cioran, pesimista a ultranza, deploraba la condición racional de los hombres, sugiriendo que la conciencia es la fuente de su desgracia... continua razonando: "Una constatación que puedo, muy a mi pesar, hacer a cada instante: solamente son felices quienes no piensan nunca, es decir, quienes no piensan más que en lo necesario". Entonces podemos entender uno de los postulados de la Escuela del Pesimismo según el cual: "el desarrollo de nuestras habilidades racionales incrementa nuestra insatisfacción vital". Lo mejor: ignorar...

Fue feliz en la ignorancia de su locura.

Kant, sostiene que los más experimentados en el uso de la razón, al hacer un balance de su vida y su dedicación al estudio "hallan, sin embargo, que se han echado encima más penas que felicidad hayan podido ganar, y, más que despreciar, envidian al hombre común, que es más propicio a la dirección del mero instinto natural y no consienten a su razón que ejerza gran influencia en su hacer y omitir". Y el poeta ingles Thomas Gray, sentenciaba: "Cuando la ignorancia es felicidad, es una locura ser sabio". El premio Nobel Anatole France, barruntaba: "La vida nos enseña que solo somos felices a costa de alguna ignorancia". En el mismo sentido decía Giacomo Leopardi: "La felicidad consiste en la ignorancia de la verdad". Por ahora y para no hacerme cansón en este tema tan, pero tan interesante, termino con un claro pensamiento del escritor norteamericano Charles Bukowski: "La tristeza es causada por la inteligencia. Cuando más entiendes ciertas cosas, más desearías no comprenderlas". Lo mejor: ignorar

Bueno, con esta entrada he querido contestarle de la forma más ignorante que pude a la supuesta afrenta peyorativa con que ese "conocido" me trató; mi adorada y sabia abuela cuando un día me viera triste, al consolarme me dijo suavemente: ¿Si lo ves mijo? para qué tenías que enterarte, porqué buscaste lo que no se te había perdido, mejor te hubieras quedado feliz, recuerda que "ojos que no ven, corazón que no siente"; viejísima, sensata y bella sentencia. Lo mejor: ignorar...

Un abrazo con un poco de ignorancia y otro de felicidad.

Hortensio.

 

Post Data
: Esta expresión inglesa de que la Ignorance is Bliss: se traduce como qué... La ignorancia es grata, se la debemos al poeta ingles del siglo 18 Thomas Grey, que en su "Oda de un prospecto distante al Colegio Eton" la cita. También la podemos describir como: Ignorar tiene enormes ventajas, entre ellas, ser mas feliz". Sin duda el vate ingles se inspiró en la frase del poeta dramático latino Publio Siro (85 a.C. a 43 a. C.) quien sentenciaba: "In nil sapiendo vita iucundisima est"... Sabiendo nada, se vive mejor o se vive más placenteramente. 
Recuerda: No se extraña lo que no se tiene, o en este caso, lo que no se sabe.