Un simple loco.
Yo viví loco toda la vida
pero nadie se dio cuenta
y cuando lo contaba casi
nadie me lo podía creer, ¿loco...?
¿vive mejor quien esconde su verdad?
Internado en un 'nosocomio'
pase malos días de "curación"
y no les conté de mi vida a los
loqueros que eran desconocidos.
Pues de mi abuela aprendí que
no debía hablar con extraños...
que están más locos que sus
pobres víctimas y pacientes.
Serán tan locos que viven ellos de
escarbar en la basura de los otros
tratando de entender cómo perdieron
su último sentido que les robó la vida.
Y loco de verdad estoy, cómo lo se
de siempre, hoy una araña peluda y
gris me invitó a almorzar zancudo
le dije que en otra oportunidad sería.
El asombro el más bello requisito de la locura.
Cualquiera puede ser esquizofrénico
paranoico o psicótico yo solo me veo
loco o más mejor... oligofrénico de
expresión ausente que busca rincones.
Vi cómo en una biblioteca los libros
se movían y respiraban y susurrando
mi nombre me llamaban para que
pudieran contarme sus historias alocadas.
Había aprendido a leer en las hojas de los árboles.
Se de mi locura que he sabido esconder
detrás de una sonrisa tímida que se fue
sumergiendo en el mar de la simpatía
y en su taimada delicadeza espuria.
Carne de psiquiatra con eléctricas caricias
pase mis días en la vorágine sin retorno
de las 'celdas de amansamiento' ignotas
de miradas morbosas, curiosas y crueles.
Pero no callemos a la indiferencia vil...
cualquiera en un manicomio puede parar
porque estamos tan locos o tan cuerdos
como se quiera o como lo entiendan otros
seres que tal vez un día nos van a juzgar.
Desconocí el valor de los días y las semanas
pues un 'sabio' de blanca bata dedujo que yo
era 'un enfermo, un caso mental no rehabilitable'
y yo me lo creí era un caso perdido...¿perdido?
me sabía lúcido pues aprendí a hablar con las ratas.
Neurosis de sanatorio mental que hace a los
días feos y melancólicos, deprimente efecto
de pura tristeza, hilo invisible y delicado que
nos puede devolver a la normalidad o hundirnos
para siempre en ese oscuro laberinto sin salida.
Y la locura en mi silencio... me hace feliz.
Farwel 1989
Algunos pensamientos...
Un loco abrazo de amistad.
Hortensio.