En esta ocasión algunos poemas cortos de Farwel, de sus "Poemas Fatigados" de 1986:
Mi único hogar.
Claro que mi juventud fue una verdad
Una verdad que a la distancia de toda
una vida mal o bien recorrida
fue el único hogar conocido,
hogar de dichas, de tristezas...
hogar de amor y bellos instantes.
La muy hidalga y noble ciudad de Tunja. |
Mi añorada Tunja...
en la que aspiré mi primer
trago de vida y amor.
Realidad prístina en donde
probé mi primera gota de
leche materna.
Mi primer llanto de vida
llamando a la ternura.
¡Cómo no amarte...!
¡Graciela!
espejismo inmortal
vino de olvido...¡salud!
¡Hambre...!
Hay noches tan desapacibles
que sólo pienso en bebérmelas
de un sorbo y soñar que ya amaneció,
tengo hambre de tu ser, de tu cama
de tu tiempo que sin mí se fugó.
Tiempo fugado.
Era tu presencia y luego tu sonrisa
de incógnita eternidad escapada
de mis sueños como el beso ausente
que ya jamás podré dar;
todo es una estúpida e ilógica razón,
razón de tiempo fugado...
miedo al inevitable naufragio.
¡Aida...!
Eres mi eslabón perdido
entre lo bello y lo fantástico
toda tallada en mi historia.
Mis hijos...
Y así son mis hijos...
distintos y distantes
opuestos y hasta dolientes,
viviendo en el mismo espacio
y el mismo tiempo,
con diferentes estigmas y
lacerados de la misma sangre y
eternos genes de mis antepasados.
¡Así son mis hijos...!
Lejanías.
Nuestras lejanías |
Nos encontraremos
en lejanías...
en la distancia que
nos confiere la muerte
para dar testimonio
de un amor perdido
en nuestra bella y
sentida juventud...
Haiku N° 2
¡Te amé...!
mas nunca supe
explicar el... hechizo.
Infinito como las estrellas.
¿Por qué lloras...?
Por qué de tanto gastar y gastar palabras
gasté las últimas que iría a poner en mi libro
que solo tiene páginas en blanco...
Tranquila, tan sólo búscalas que ellas son
como estrellas en el infinito.
La hoguera.
Siempre e sido iconoclasta y
por demás, pirómano...
En la hoguera de la infamia
quemé tu bendito retrato y
tu maldita ingratitud...
Caretas.
Al amor si en verdad te asomas
trata de llegar sin caretas...
Sin aquellas bellas máscaras venecianas
que a la larga siempre caen y se quiebran
con dolor y tragedia.
Un vino más.
Vino de los dioses,
vicio delicioso,
néctar divino que se opone
a la hiel del pesado y azaroso
día que se está yendo;
sed insaciable...
sin forma ni medida,
si no vienes a mí, me tocará
tomar la hiel de la indolente
noche que me mira...
¡Por favor... un vino más!
Con mi sangre.
El viento del olvido
jamás se llevará el
recuerdo de un amor
que se ha escrito...
con trazos de sangre.
Mi padre.
Tenía la oposición
como su elemento,
y la independencia
como su mayor placer,
sólo así pudo vivir...
¡Era mi padre! Alberto.
Un recuerdo.
Toda nuestra eternidad
se puede recoger en un
solo recuerdo de... amor
ese recuerdo que nos
llevaremos a la tumba.
Una esquirla N° 5
Tus recuerdos son
más livianos que la
página que contiene
un remanso que se
niega a morir...
Sin prisa... un abrazo.
Hortensio.