Barruntando: Hay deberes más fuertes que cualquier deseo. (Farwel)
El Pensador. |
Pensé en ese instante único: ¿tendría dolor al abrir su colorido cáliz y salir de su encierro para saludar a su Madre Naturaleza? es dolor, es una explosión en las entrañas del Universo, fue su parto, - ¿será una comparación fea?- no lo sé, pero en La Naturaleza todo fluye a través de la vida y la vida trae consigo el dolor.
Todo aquello quedó en mi retina incluyendo ese pensamiento florido y lleno de dudas... y no pude seguir barruntando.
El extraño lenguaje de la noche,
El extraño lenguaje de la noche. |
La noche nos ve y nos escucha, es indescriptible estar en medio de la noche en una selva verde y oscura para escucharla, es en su oscura soledad el hábitat normal de miles de animales porque la noche habla. Mil sonidos articulados en un extraño idioma que agudiza el oído.
En una exótica noche cuando un 'extraño' hombre -hecho para la luz del día-, deja que la noche le caiga encima, y eso es perder su elemento y más cuando no hay luna llena -no la pálida menguante- que acompañe nuestros miedos y nuestra afectada imaginación y en el aire que se respira en esa noche se convierte en un frío viento que golpea la cara del atrevido 'extraño' y sacude su cuerpo para después calmarse.
Caminar en la noche selvática, es no poder distinguir siquiera la sombra oscura del intruso. La noche es un hilo tenue y firme, muy fuerte que nos conecta con esa cara tan necesaria que nos regala la Madre Naturaleza, para que el "músculo descanse" y el sueño reparador sea el don pasivo del cuerpo. Pero en la selva no se duerme y al detenernos solo queda escuchar 'el extraño lenguaje de la noche'.
Un fuerte abrazo si has pasado por aquí.
Hortensio.