martes, 22 de diciembre de 2020

Esperar y ver que pasa.

En este atípico martes de pandemia, antesala de la navidad, una inquietud que me asaltó ante la cantidad de noticias sobre las 'vacunas' y su implementación a nivel de los países y esto es lo que tengo que decir al respecto de lo ya sabido...

Ser un país del "tercer mundo" en medio de ésta pandemia agotadora del SARS - CoV - 2 o 'Covi' como le llaman "cariñosamente" en las calles, pues en este caso específico de las vacunas, tiene sus ventajas y me explico: 
La angustia del contagio y la mortal infección por parte del invisible asesino, tiene loco a toda la humanidad llevándola a extremos del pánico total que ha conducido y como consecuencia, a la acelerada carrera farmacéutica por la creación de dicha 'vacuna'... y todo parece que se ha logrado.

La Incertidumbre...

Qué bien que sean los "ricos" los se vacunen de primero y nosotros los pobres (que hemos aprendido a vivir con el mismo demonio) estaremos atentos a los resultados terapéuticos de ella y eso incluye sus efectos secundarios. Como cada uno de nosotros tiene sus propios miedos y valores, las circunstancias de cómo manejarlos, yo con ésta nota quiero darles - a los que me lean- un poco de tranquilidad si es que pueden entenderlo...

En el sentido empírico del método científico del razonamiento deductivo del problema (análisis de datos con su rechazo y confirmación) es la forma de comprobar la eficacia de un experimento o una prueba determinada y para volver al tema propuesto en el título de ésta entrada,  los científicos prudentemente llaman a ésta técnica "Inercia terapéutica intencionada" que no es otra cosa que "el arte de no hacer nada" y esperar los resultados de los experimentos ajenos que es una posición por demás prudente y lógica ante el fenómeno de la incertidumbre. 

Ésta se define como falta de seguridad, de confianza y de certeza sobre algo y especialmente cuando crea inquietud e inseguridad, duda y vacilación,  en definitiva, todo huele a indecisión y sospecha. Todo eso provocan las tales 'vacunas' en la inmensa mayoría de las gentes del común incluyendo todo tipo de las llamadas "teorías de la conspiración ".

Teorías de la conspiración...

Ahora, no hacer nada -por el momento- y esperar, es la mejor opción terapéutica y diagnóstica, pero eso sí, mantener una actitud expectante y a la prudente espera de que haya más conocimiento sobre las mismas y sus resultados...




Un abrazo expectante.

Hortensio.

Post escriptum: Yo sí me voy a vacunar... no se Usted.


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