domingo, 29 de mayo de 2016

El infame genocida.



El infame genocida.

"¿Hasta cuando los dioses nos harán sufrir?
¿Van hacernos sufrir enfermedad  para siempre?"
Atrahasis de Mesopotamia.
cinco mil años a. de C.

 En este no muy Plácido domingo... tengo que estar de acuerdo con el mundo entero: "La mayor maldad conocida por la humanidad es el asesinato" Quitarle la vida a un ser humano es la mayor de todas las aberraciones y la más detestable que pueda existir. Es por ésto que la humanidad entera condena y odia a los homicidas y sus matanzas, y en todas las legislaciones tienen, en sus códigos penales las máximas penas a imponer a esos asesinos... pero cuando el asesinato es premeditado, selectivo o sistemático, masivo con fines de exterminio de una raza o grupo social, motivado infamemente por cuestiones de "limpieza étnicas" o de razas, política o religión (exterminio de seres de otra fe), todo eso se potencializa y degenera en lo peor de lo peor que pueda tener la criatura humana, su 'crueldad animal'.

Los genocidios:

Pero están los peores, los genocidas, cuya palabra deriva de unir la raíz griega genos (familia o tribu) y del vocablo latino cidio (de cidere, matar). Aquí una pequeña, pero pequeñita muestra para recordar lo que han sido esos asquerosos "seres" que se hacen llamar líderes (religiosos o políticos) y su crueldad; podríamos hacernos casi que interminables, pero estos son los más nombrados:


El holocausto del pueblo armenio por los turcos otomanos liderados por Ismail Enver Pashá, con más de un millón de armenios masacrados; las matanzas de la inquisición en cabeza del tristemente célebre cura dominico, Tomás de Torquemada, miles de inocentes torturados y quemados; el holocausto del pueblo judío en Europa a manos de un loco como Hitler y sus secuaces; los miles y miles de asesinatos selectivos, desapariciones y tortura del pueblo ruso de la mano tiránica y asesina de Stalin y su régimen comunista; los asesinatos masivos del régimen maoísta de Pol Pot y sus 'jemeres rojos' (Khemer Rouge) se calcula que casi tres millones de camboyanos murieron en los campos de la muerte; Yakubo Bowon, asesinó a más de un millón de sus opositores de etnia en Nigeria; el omnipotente Kim il-Sung, que en una purga de opositores, asesinó a más de millón seiscientos mil coreanos del norte; los crímenes del apartheid en Sudáfrica; el buen rey católico y cristiano Leopoldo II de Bélgica, que patrocino y trató de callar y esconder la vergüenza de ser autor de uno de los más grandes genocidios de la historia humana, con más de diez millones de congoleños asesinados; Mao Zedong, que con su revolución cultural, asesinó a más de 20 millones de chinos nacionalistas... ¡qué muestrica!... ¿No?

El furibundo y vengativo dios
de Miguel Angel en la Sixtina.

Estas 'masacres' o genocidios y asesinatos son catalogados por la comunidad internacional como crímenes aberrados de 'lesa humanidad'crímenes que agravian, ofenden e injurian a toda la humanidad en su conjunto, motivo por el cual jamás pueden prescribir por la acción del tiempo.

Pero comparando, si así se puede decir, a éstos criminales con el furibundo e intolerable dios de los judeo-cristianos llamado Yahvé, o ¡¿Jehová!?  el que hasta hoy en día se pasea por las ensangrentadas páginas de la Biblia, con la premisa de que esas historias son Ley o dogma u orden divino, es decir palabra de Dios, y no se puede tan siquiera dudar de ella, entonces podemos, Biblia en mano y leyendo, contabilizar página por página, los asesinatos que ordenó éste ser invisible, como si fuese un extraño 'monstruo' que odió al hombre y atentó contra de toda la humanidad. 

Miremos sin entrar en detalles... Ordenó el diluvio universal, con cálculos que podrían quedarse cortos para casi asegurar que murieron más 50 millones de personas que no conocían a este 'homicida despiadado', luego, cuando la humanidad se recuperó,  ordenó el exterminio de otros pueblos y ciudades enteras (Sodoma y Gomorra) ciudades que podían pasar de 50.000 habitantes y seres humanos que no tenían la culpa, perdón, 'la gracia' de no creer en El y en su 'pueblo escogido' y por el solo hecho de ejercer su "sacrosanto" libre albedrío.

Ese dios en el que 1Juan 4,8 tanto creyó y del que decía: "Dios es amor"... es muy bonito, pero cuando empezamos a caminar por los versículos del antiguo testamento, podemos ver con nuestros propios ojos que ese "dios" no es como lo pinta el versículo de Juan, es algo más y peor, nada amoroso ni mucho menos entrado en misericordias con sus enemigos; es sin dudarlo un despiadado asesino que premeditadamente y por voluntad propia quiso serlo, y pienso en su crueldad y sevicia... cómo fue capaz de asesinar a todos los primogénitos egipcios Ex 9:25, por desarraigar a un pueblo sucio, incrédulo y vulgar, que no quería ir a una "tierra prometida" que nunca existió; se tienen varias referencias de cálculos de que con ese genocidio murieron más de un millón doscientas mil de personas, seres humanos. Me pregunto, ¿porqué no mató al faraón y evitó tantas muertes? Y ¿qué le hicieron el millón de etíopes que mandó matar? 2Cro 14:9:14 o el aberrante caso de los 42 muchachos o niños que mató porque se burlaron de la calva de un profeta suyo ¿en las garras y fauces de dos gigantescos osos sedientos de sangre como su dueño? 2Rey 2: 23-24. O cuando hirió y mató lentamente (siete días) a un bebé. 2Sam 12: 14-18. 

Pero en la discusión, no faltó el buen creyente que salió con lo de siempre : 'Los pasajes de la Biblia no deben interpretarse literalmente' entonces ¿qué hacer, con la palabra-ley de ese amoroso Dios? Las cifras y los hechos ¿son ficción? o hablan por sí solos... ¿Cual es la excusa?


El diluvio o exterminio de la humanidad
ordenado por Yahvé...

Me haría interminable en contarles uno a uno los asesinatos ordenados por éste ignoto ser de venganza, pero Noé Molina, un juicioso y curioso estudiante de la Biblia, se tomó en serio la tarea de averiguar hoja por hoja, versículo por versículo, las andanzas crueles y homicidas de éste Señor, en su blog. de "Ateísmo para Cristianos" y en la entrada que llamó: "Los Asesinatos de Dios", la cual consulte y verifique, con la "Inspiración Divina" de la Biblia en mano, la veracidad de los versículos que son la prueba de sus crueldades homicidas... convicto y confeso de haber ordenado el asesinato de más de 60 millones de personas, hombres, mujeres, ancianos y niños, hasta animales... ¿me quedé corto? No lo sé... Ustedes tendrán su propia opinión, con la Sacratísima palabra de Dios en la mano, su santísima Biblia.

Un desconcertante abrazo.

Hortensio.

P.D.: Poco antes de morir en 1826, Thomas Jefferson, el que fuera el tercer presidente de los Estados Unidos, decía en una reunión de la logia masónica, algo que no ha cambiado a éstas alturas del Siglo XXI: "Millones de seres inocentes, hombres, mujeres y niños, desde la introducción del cristianismo, han sido torturados, asesinados, puestos en prisión y quemados, y sin embargo no hemos avanzado ni una pulgada hacia el consenso general. ¿Cuál ha sido el efecto de obligar a la gente a creer? Que la mitad de la humanidad vive engañada y la otra mitad vive en la hipocresía, con tal de que el error y la mentira no desaparezcan del mundo." 

No hay comentarios:

Publicar un comentario